Gárgaras de gárgolas

Ahí quedó el ruido petrificado

26 abril 2006

Yo, dodó

El aparcamiento subterráneo estaba oscuro, frío y lleno de muebles. Al fin, se divisaba poco a poco como esos muebleseran sillas y mesas que estaban alumbradas por la tenue candela que de una vela se desprendía. Los comensales eran muy elegantes, todos con el triquiteo de los tenedores, los cuchillos y las futuras cucharillas de postre que iban a ser desvirgadas.
De pronto, la puerta del aparcamiento se abrió y entró un gran chorro de luz. Los comensales, muy elegantes, dieron un salto de sus silles y empuñaron barrotes de metal para entrar en acción ante aquella situación. La puerta hacía mucho ruido y la luz era muy potente, con lo que no pudieron divisar absolutamente nada.
Una pequeña sombra se dibujaba, nada más. ¿Qué sería? ¿Qué no sería? Los amigos, hermanos, primos y demás familiares no creían que nada pudiera estropear su cena. Alguien preguntó:
-¿Quién eres? ¿Por qué te escondes?
El silencio fue su repuesta
Por segunda vez:
-¿Quién eres? ¿Por qué te escondes? ¡Contesta!
La pequeña sombra seguía sin contestar.
En el aparcamiento se podía percibir cierto olor a aceite de coche y a neumático quemado. El dodó, ya extinguido reconocía estas pestilencias.
-¿No sabéis quién soy? Muy mal, pues no parecía eso cuando os divertiáis a mi costa... En la costa...
El dodó malgache se quedó estático. Portaba en la mano una botella de mostaza, gas mostaza. La destapó y ante la atónita mirada de los que allí se reunían, arrojó la botella al interior. Luego, cerró la puerta y dejó morir a los comensales en frente de sus platos con muslo de pato.
Sonriente y patizambo, el dodó echó andar riendo, saldando las cuentas de sus antepasados. Tiempo después, algunos dicen que lo vieron traficando con cuadros robados, otros afirman que dejó de vagar en busca de venganza y se retiró a un pueblo turístico a pintar cuadros que luego vendía y aún otros decían que eso del dodó no era cierto, nada de nada, que ese pájaro se extinguió hacía ya mucho, mucho tiempo.